Debo confesar que sonará un poco contradictorio este articulo, puesto que me dedico a que las personas o empresas alcancen determinado objetivo, pero tambien en mi corta experiencia, me he podido dar cuenta de las muchas veces que con orgullo y satisfacción se han logrado dichos objetivos; pero, una vez alcanzados miramos hacía atrás y recordamos los gratos momentos que pasamos durante el viaje hacia el objetivo y guardamos ese momento con una alegre nostalgía.
Las alegrías, las tristezas (con lágrimas incluidas) y hasta los enfados de habernos enfrentado con nosotros mismos, la elaboración de algunos deberes que aunque sencillos, muchas veces inacabos y evadidos. Es más, es curioso, porque a la gente le dejas un delicioso sabor de boca, al haberles mostrado otra forma de enfrentar las diversas situaciones de la vida, y por ese mero hecho, ya es muy gratificante la labor, pero te queda la sensación de que todo fue muy ràpido y que se pasó el tiempo volando!
Con lo cual, a veces detenernos y echar un vistazo a nuestro entorno, además de ayudar mucho con el proceso, hace que seamos más conscientes de ese momento porque es Único e Irrepetible, para que cuando lleguemos a la Meta tenga muchísimo más valor, tanto para el Coach, como para el Coachee, entonces, mi mas sincera recomendación: Disfruta del Viaje… llamado vida!
Un saludo.
