Si hay algo de lo que siempre me he sentido honrada y orgullosa es de pertenecer a una familia de emprendedores innatos, es algo que definitivamente lo llevamos en la sangre.
Seguramente será por que es el ejemplo que hemos recibido desde mi Abuelo, que desde muy joven decidió emprender y con su constancia, responsabilidad, autodisciplina y compromiso; nos enseñó que trabajar por cuenta propia puede ser todo un reto, que no es fácil y que es toda una aventura.
Pero una aventura que vale la pena experimentar, para saborear la libertad de nuestras propias decisiones y así dirigir con templanza el barco de nuestras propias vidas, porque ese es la vida de un emprendedor, que por mucho que se convierta en un empresario, hay comportamientos que no pueden, ni deben cambiar para poder mantenerse.
Es el caso de uno de los hombres más importantes de mi vida, mi segundo padre, mi inspiración, mi ejemplo y mis respetos; mi tío Jorge Torrente. Que orgullosa me siento de su presencia en mi vida, su persona y su trayectoria que ¡ha sido galardonada!..
Mi tío, Gracias porque este Galardón Mercurio de Oro enaltece nuestros valores como familia, valores que ten la plena seguridad, aunque en la distancia aplico todos los días de mi vida, porque soy emprendedora en tierras lejanas, ya que eso es lo que me has enseñado, eso es lo que he aprendido, ese es tu mejor legado.
Felicidades mi viejo! Un abrazo para mi tía Edith, saben que los quiero con locura infinita!!
Tu sobrina Erika.
Un saludo para todos los de la foto, mis tíos, tía Flor, mi prima Alejandra y a los empleados, parte fundamental de la Papelería Cartagena.
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Photo Credit: Diario La Nación.
