Pues eso es muy triste. Es evidente que no somos perfectos, esta claro. Pero también es evidente que en la mayoría de los casos sabemos cuales son nuestros defectos. Digo en la “mayoría” porque no faltan las personas que son poco introspectivas y no se dan cuenta de nuestra imperfección y no son conscientes que hay conductas propias que definitivamente hay que trabajar.
Son ese tipo de personas que siempre dejan el trabajo a los demás:
“es que fulanito de tal tiene que cambiar esto o aquello” es decir; él tiene que cambiar, yo no.
Pero es que hay quienes están en un mayor error con otra frase muy típica:
“si yo sé que soy.. “así”…. “ya lo cambiaré”… (algún día)
Entonces mi pregunta sería: Vale, si ya sabes que eres “tal o haces tal cosa”.. ¿que estas haciendo a día de hoy tú, para cambiarlo?..
Te aseguro que las respuestas serían muchas.. y en su mayoría mas que respuestas, serían unas buenas excusas, desde que las excusas se inventaron, ¡todo el mundo queda bien!
Los tiempos han cambiado y es importante que nosotros también nos pongamos en la tarea de evaluarnos, que dediquemos mas tiempo a observarnos a nosotros mismos, a evolucionar y analizar en que cosas fallamos y como las podemos modificar.
Además es una regla de tres muy simple: ¡cambia UNO y el entorno también cambia!.. es mágico!.. Dejas de esperar de los demás, para empezar a actuar.
“No hay mayor guerrero que el que lucha por el dominio de si mismo, de su mente y de sus pensamientos.”
Esa si es una verdadera aventura, navegar en nuestras propias emociones y en nuestros propios miedos para reconocerlos, aceptarlos y así trabajar en ellos.
Pero si seguimos pensando que es más fácil hablar de los defectos del vecino, y que los demás son los que deben cambiar..vamos muy mal..Definitivo: ¡Hay que evolucionar!
Y recuerda HOY es el día perfecto para empezar a cambiar esas pequeñas cosas…
