Después de unas largas vacaciones y de reflexionar mucho acerca de la eficacia que tiene algo tan simple como lo es decretar, quise darle la importancia que merece a este acto tan consciente y tan bonito. Decretar sin lugar a dudas es algo que te reafirma, confirma, materializa y cambia tu realidad.
¿Supersticiones? No en absoluto. Tu realidad la creas tú, con tus pensamientos. Además de trabajar en lo que quieres conseguir, claro está. Eso de decretar y estar todo el día tirado en el sofá, pues como que no. Es muy importante que una cosa vaya acompañada de la otra, si quieres conseguir algo, debes hacer algo día a día para llegar a ese objetivo, pero además decretar con una frase muy específica eso que quieres alcanzar.
Vamos a poner un ejemplo para que se entienda mejor.
Hay muchas personas que no tienen una buena autoestima, entonces para que esto cambie; debes hacer dos cosas.
- Trabajar en tu autoestima diariamente, con acciones muy simples pero constantes; como mirarte al espejo todos los días y decirte: “Deseo cambiar la percepción que tengo de mi misma”
(Hasta aquí has deseado solamente, pero hay que llevar ese deseo a la acción)
¿Cómo? Es muy fácil; con frases como: “Que guapa estoy” y “Me quiero”
IMPORTANTE: Debes ser constante, si lo haces por un periodo de 28 días mejor.
2. Una vez ya has hecho este “ejercicio” y lo has integrado en tu vida, podrás empezar a decretar en voz alta: (Tranquila hazlo cuando estes sola, donde nadie te oiga)
Soy amor, emana de mi.
Soy bella.
Soy única y valiosa.
Con estos 3 decretos simples, y si es por un periodo de 28 días mejor, empezarás a notar cambios muy sutiles. No esperes milagros. Esta es la realidad y en este plano, las cosas tienen sus procesos y los resultados solo se ven si actúas, de lo contrario nada sucederá.
Importa que decretes, que te visualices en ese estado al que quieres llegar y lo hagas con consciencia y certeza.
¡Pruébalo y espero tus comentarios!
¡Buen comienzo de año escolar!! 🙂