¡Hola bonitas y bonitos! Parece que hubiera pasado una vida entera y sólo han sido un par de meses de desconexión virtual ¡yo también os he echado mucho de menos! ya estoy aquí devuelta con mucha ganas de compartir con vosotr@s muchas cosas bonitas y útiles 😉
Bueno empezaré por contaros que cuando yo desconecto, lo hago textualmente; pues elimino de mi móvil las RRSS y veo poco mi correo electrónico, por eso hasta ahora estoy empezando a responder mails. Para mí, es de vital importancia hacer OFF a nivel digital y retornar a la vida real, reencontrarme conmigo misma, dedicarme tiempo y dedicarle tiempo a mi familia con total consciencia. A eso le llamo VIVIR.
Y no me pueden faltar ellas, mis bonitas, mis amigas, con quienes comparto esos momentos tan importantes de largas conversaciones, risas, cenas etc. que para mi son toda una terapia, tenerlas es uno de mis mayores tesoros y poder disfrutarlas definitivamente es un regalo…
Bueno y ni qué decir de este señor… ¡tengo a un caballero por marido! y que en cuanto podemos y nos dejan las nenas, nos pegamos nuestras escapaditas…
¡Impajaritable!.. no hacer maletas para 5, ir de aeropuerto en aeropuerto, hacer conexiones, coger el metro, volar en avión, atravesar el atlántico, buses y taxis para ver al resto de la familia, regresar al nido y ¡disfrutar de mi checho bonita!
Esto es un pequeño extracto de mis vacaciones ¡y si también bailé y mucho! lo que pasa es que cuando te lo pasas tan bien haciendo algo que te apasiona no hay tiempo para fotos, por eso es que de los momentos más importantes de la vida casi no hay registros..
Bueno.. pues ya estoy aquí, con las pilas bien recargadas, más viva, más fuerte y más sabia…
y porque no, ¡más guapa!
¿Comenzamos? 😉